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Alimentación en Lecherías
Remolacha Forrajera o Remolacha Azucarera

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Aunque la remolacha puede usarse para alimentar muchas categorías de ganado rumiante: vacas secas, vacas en lactancia, novillos de engorda, vaquillas en desarrollo y ganado en mantención, destaca particularmente en Chile el crecimiento del uso remolacha en ganado lechero en los últimos años, principalmente en dos modalidades:

  • Remolacha forrajera en pastoreo directo de vacas en período seco y
  • La suplementación con remolacha azucarera de vacas en período de lactancia

¿Que se utiliza más actualmente en Chile, la remolacha forrajera o la azucarera? La respuesta es que ambas son muy utilizadas, para diferentes propósitos.

KWS, principal productor mundial de semilla de remolacha azucarera y promotor del desarrollo de la remolacha en la alimentación animal en el sur de Chile nos explica las ventajas de la remolacha en alimentación de ganado en general y en lecherías, de acuerdo a su experiencia en los últimos años. También nos comenta detalles de la utilización de remolacha forrajera y remolacha azucarera para diferentes tipos de ganado lechero.

Cuáles son las Ventajas Específicas de la Remolacha como Alimento

Alto Rendimiento y Bajo Costo

Aunque el uso de la remolacha como alimento animal tiene siglos de historia en Europa, el crecimiento reciente de su uso en Nueva Zelanda y posteriormente Chile se debe a su economía como alimento calórico y a su facilidad de uso, en pastoreo directo o cosechada. El alto rendimiento de materia seca por hectárea permite
diluir los costos del cultivo y generar un bajo costo por kilo de materia seca, con una calidad nutritiva excepcional.

En el sur de Chile, la remolacha puede rendir fácilmente entre 18 y 24 toneladas de materia seca en campos razonablemente manejados sin riego. En cultivos regados no es difícil llegar a las 30 toneladas de materia seca por hectárea. La remolacha también es conocida por su resistencia y adaptabilidad a varios tipos de suelo y condiciones climáticas, lo que mejora aún más su idoneidad como opción forrajera rentable. Hay que reconocer que es un cultivo que requiere de trabajo durante la implantación y el control de malezas, pero un buen manejo inicial evita problemas y genera plantas desarrolladas con buen potencial de rendimiento.

Valor Nutricional

La remolacha es un cultivo forrajero altamente energético, comparable a los granos, lo que la convierte en una excelente fuente de calorías para los animales. La raíz de la remolacha tiene una concentración calórica cercana a las 3 Megacalorías de Energía Metabolizable por kilo de materia seca. Tanto el azúcar de la remolacha como su fibra soluble son altamente digestibles y proporcionan una fuente de energía rápida.

La remolacha forrajera posee una raíz que crece aproximadamente en un 50% sobre el suelo, se pastorea directamente y alcanza un contenido medio de Proteína Cruda entre 8 y 12% incluyendo hojas. El porcentaje de Proteína Cruda depende de la variedad, la cantidad de hoja y las condiciones de desarrollo del cultivo, siendo un valor con bastante fluctuación. El contenido de Proteína Cruda de raíz de la remolacha azucarera es bastante menor que la remolacha forrajera y puede llegar a 5 o 6%.

En Chile, la remolacha suele tener un bajo contenido de Fósforo y Selenio. Esto requiere la suplementación de estos minerales cuando la remolacha constituye más del 70% de la dieta, como en el caso de las vacas secas en pastoreo directo, que consumen remolacha forrajera ad libitum después de un proceso de adaptación cuidadosamente gestionado.

Utilización del Agua

La remolacha es un cultivo eficiente en el uso del agua en comparación con otros cultivos forrajeros. Esto significa que la remolacha puede producir más biomasa por unidad de agua utilizada, lo que reduce la presión sobre los recursos hídricos en áreas con escasez de agua o donde el riego es limitado. Además, la capacidad de la remolacha para crecer en una amplia variedad de condiciones de suelo y climáticas también puede ayudar a diversificar los sistemas de cultivo y reducir la dependencia de cultivos con mayores demandas de recursos. En climas como el del sur de Chile, es común tener veranos bastante secos. La remolacha puede retardar el crecimiento mientras falta agua y luego seguir creciendo y agregando varias toneladas de materia por hectárea hasta el otoño (abril – mayo).

Remolacha Forrajera en Pastoreo Directo

El pastoreo de vacas secas al estilo de Nueva Zelanda, con remolacha forrajera en pastoreo directo y cerco eléctrico, representa un uso popular la remolacha forrajera que permite reducir los costos de alimentación en el periodo seco en la producción estacional de leche.

Este sistema tiene la ventaja de manejar el ganado en bloques de producción, generando grupos ordenados en estado productivo que facilitan la planificación y control. Durante el periodo seco, es fundamental proporcionar grandes cantidades de alimento para el 100% de las vacas preñadas y liberar las praderas para su posterior crecimiento en primavera. La remolacha forrajera, complementada con aproximadamente un 20% de forraje, es perfecta para lograr mantener un gran un gran número de vacas comiendo en una superficie limitada.

La remolacha forrajera es fácil de implementar en sistemas de pastoreo directo, lo que simplifica su uso en la alimentación del ganado y la convierte en una opción atractiva para los agricultores que buscan soluciones forrajeras eficientes y con bajo costo de mano de obra.

En un sistema de alimentación de vacas secas con pastoreo directo de remolacha forrajera es importante lograr un cultivo bien manejado, para que sea rendidor y de bajo costo por kilo de materia seca. También es fundamental elegir terrenos en que no se forme barro fácilmente durante el pastoreo de invierno. Lo más adecuado son suelos con lomajes con alguna pendiente para que escurra el agua de lluvia.

Como las vacas estarán comiendo remolacha forrajera ad libitum en aproximadamente 80% de su dieta, es importante logar un proceso de acostumbramiento o Transición, donde el racionamiento diario adecuado, vía cerco eléctrico permite el consumo progresivo y creciente durante 14 a 21 días para llegar al consumo máximo. Un racionamiento adecuado permite evitar los cuadros de acidosis en la alimentación con remolacha forrajera.

El sistema tipo Nueva Zelanda funciona cuando estrictamente cuando todas las vacas se secan al mismo tiempo. ¿Qué se puede hacer cuando se trabaja en un sistema chileno de parto multi estacional donde no todas las vacas se secan a la vez? En este caso, también se puede manejar la alimentación con remolacha forrajera en período seco. La técnica se torna un poco más desafiante ya que hay que manejar el período de Transición por lotes de animales en la medida que se secan las vacas, ya que siempre es necesario empezar y terminar el proceso de Transición con el mismo lote de animales.

¿La alimentación de vacas secas es el único uso de la remolacha forrajera en ganado lechero? Definitivamente no. En los últimos años han aumentado el número de agricultores usando la remolacha forrajera como suplemento (2 a 4 kgs de materia seca al día) en vacas en lactancia. Este uso permite reemplazar la mayor parte de los granos en la dieta con considerables ahorros. La técnica consiste en llevar las vacas a un potrero cerca del lugar de ordeña para pastorear aproximadamente 2 horas y realizar esta ingesta.

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Remolacha Azucarera en Vacas en Lactancia

¿Qué diferencias tiene la remolacha forrajera y la remolacha azucarera? La remolacha azucarera es una planta que crece bajo el suelo, a diferencia de la remolacha forrajera que crece en un 50% sobre el suelo. Estamos en presencia de la misma especie, pero con algunas características diferentes y similares parámetros alimenticios.

La remolacha azucarera contiene un 22-23% de materia mientras que la raíz de la remolacha forrajera habitualmente tiene un 12-17% de materia seca. Esto hace que la remolacha forrajera tenga un pastoreo directo más fácil (más blanda). Por otro lado, la mayor materia seca de la remolacha azucarera permite que se pueda conservar más tiempo en pilas luego de la cosecha durante el otoño e invierno (3-5 meses). Por último, la remolacha azucarera tiene mayor rendimiento en raíces cuando las condiciones de cultivo son adecuadas.

La remolacha azucarera debe sembrarse en primavera y cosecharse en otoño. Para la cosecha, se debe contar con maquinaria apropiada o contratar el servicio de cosecha. La remolacha se almacena apilada al aire libre y con la temperatura de otoño/invierno se conserva varios meses. Luego, al utilizar la remolacha debe picarse con una herramienta simple llamada pala picadora, conectada a la fuente de energía de un tractor. La remolacha picada se mezcla en una ración tipo TMR a razón de 2 a 4 kgs de materia seca al día, previo un período de adaptación de las vacas de aproximadamente 7 – 14 días.

El costo del kilo de materia seca de la remolacha azucarera puede llegar a ser la mitad del costo de kilo de materia seca de maíz molido y puede reemplazarlo casi totalmente en la ración de vacas en lactancia. Dependiendo del tipo de dieta, cada kilo de materia seca de maíz podría ser reemplazado por 1,1 kilos de materia seca de remolacha forrajera. Estudios recientes, han llegado a medir un ahorro superior al 20% en los costos totales de alimentación de vacas lecheras en invierno.

Conclusión

En resumen, la remolacha es un cultivo forrajero que ofrece múltiples beneficios a los agricultores. Su alto rendimiento, bajo costo por kilo de materia seca y valor nutricional ofrecen un alimento conveniente para los sistemas lecheros en las fases productivas más importantes.

La remolacha forrajera y la remolacha azucarera tienen una composición nutricional equivalente, aunque cada una tiene características propias que facilitan distintas modalidades de consumo. Ambos tipos de remolacha están siendo ampliamente usadas en Chile.

La remolacha forrajera permite el pastoreo directo y un muy fácil uso con cerco eléctrico, con bajo costo de mano de obra. La remolacha azucarera requiere de más trabajo por la cosecha y picado pero, al reemplazar directamente una parte muy importante de los granos en la dieta de vacas en lactancia, permite importantes ahorros.

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