Frecuentemente, en los sistemas lecheros los terneros son criados con un limitado acceso a leche (10% de su peso vivo). Terneros alimentados con ésta restricción tienen un pobre bienestar debido a que experimentan hambre por períodos prolongados, presentando expresiones comportamentales no deseadas como vocalización excesiva, “chupeteo” redirigido, mayor actividad y menos descanso, así como menor crecimiento pre-destete. (Rosenberger et al., 2017).
En las ediciones 61 y 63 de Agrocolun, abordamos la alimentación del ternero en el pre-destete y las consideraciones básicas con relación a la alimentación de leche, concentrado inicial, acceso a fibra y agua. En esta edición entraremos en un poco más de detalle sobre la alimentación láctea y su relación con el bienestar animal, en complemento a la edición anterior (67), con lo cual terminaremos de reforzar las claves para una crianza exitosa.
Cantidad de Alimentación Láctea
Una de las mayores conclusiones que han hecho los científicos en los últimos años es que la nutrición láctea de las terneras tiene un efecto profundo, no solo en su salud y crecimiento en los primeros meses de vida, sino también en su futura producción de leche. Por lo tanto, más leche en el pre-destete significa una mayor producción de leche en la lactancia. La recomendación actual es proveer como mínimo el 20% del peso vivo en leche o sustituto lácteo a los terneros. Si bien esta cantidad puede parecer excesiva y a un alto costo económico, los beneficios a corto y largo plazo de este plan nutricional han sido ampliamente estudiados.
Por otro lado, planes nutricionales restringidos reducen el crecimiento, pueden generar desnutrición, comportamientos no deseados e inmunosupresión, afectando el bienestar de los terneros (Palczynski et al., 2020).
Los terneros, durante el primer mes de vida, obtienen las calorías necesarias para su mantención y crecimiento de la leche o del sustituto lácteo, y la contribución del concentrado inicial en este periodo está más enfocada en el desarrollo ruminal y no en su aporte calórico (Jones y Heinrichs, 2022). Entonces, es en las primeras 4 semanas de vida donde debemos poner mayor énfasis en la cantidad de leche ofrecida.
En la figura 1 podemos ver que, independiente de la cantidad de leche brindada durante el pre-destete, el consumo de concentrado comienza a aumentar y representar una fuente de calorías desde la cuarta semana de vida, esto sucede, incluso, cuando los terneros son alimentados con planes nutricionales restringidos a 4 litros de leche al día (De Paula et al., 2017). Ahora bien, aumentar la cantidad de leche al menos al 20% del peso vivo, conlleva cambios en el manejo los cuales deben ser cuidadosamente planeados, ya que cualquier aumento o disminución en la oferta de leche debe ser gradual para evitar estrés y diarreas nutricionales.
También, es necesario considerar que los terneros deben ser alimentados con leche o sustituto lácteo de buena calidad nutricional como higiénica.
Calidad Nutricional
En el mercado tenemos a disposición distintas calidades de sustituto lácteo que contienen una gran variabilidad en el contenido de proteína y grasa, lo cual influye en el precio de venta. Como referencia, la leche entera, en base a su materia seca, tiene aproximadamente 25% de proteína y 28 a 30% de grasa. La mejor manera de saber la composición y calidad de un sustituto lácteo es leer su información nutricional. Lo ideal es que ofrezcamos sustituto lácteo con una composición nutricional lo más cercana posible a la leche entera y que la fuente de proteína sea principalmente láctea y
no vegetal.
La digestibilidad de las proteínas vegetales es baja en comparación a las de origen lácteo y en terneros jóvenes pueden llegar a generar reacciones alérgicas o diarrea (Jones y Heinrichs, 2022). Igual de importante es preparar el sustituto lácteo según
las recomendaciones del fabricante, ya que estos productos han sido estudiados bajo las condiciones descritas en las instrucciones.
Si deseamos hacer alguna modificación en la preparación del sustituto lácteo, debemos hacerlo bajo la supervisión de un veterinario o asesor calificado, así como los registros adecuados para monitorear la salud y crecimiento de nuestros animales e intervenir a tiempo en caso de ser necesario.
Calidad Higiénica
En relación a la calidad higiénica o carga de patógenos, sabemos que la leche es un medio ideal para el crecimiento de bacterias. Es por eso que debemos alimentar a los terneros lo antes posible una vez que preparamos el sustituto lácteo, ordeñamos leche cruda (descarte o vacas sanas) o preparamos leche pasteurizada. Considere que incluso si usamos leche de vacas sanas, a temperatura de extracción, la cantidad de bacterias se duplican cada 20 minutos (Leadley, 2010).
Por otro lado, la pasteurización reduce la carga de patógenos, pero no la elimina por completo. Una consideración es que cuando alimentamos con leche de descarte, ésta no tiene que provenir de vacas con mastitis clínica, ya que la carga bacteriana será alta incluso si pasteurizamos. Por otro lado, los antibióticos en la leche de descarte pueden producir resistencia antimicrobiana y diarreas en terneros (Penati et al., 2021).
Finalmente, cuando alimentamos con planes nutricionales de mínimo el 20% del peso vivo, al menos durante el primer mes de vida, los terneros podrían reducir los comportamientos no deseados, como el chupeteo y los desplazamientos al momento de la alimentación (Velásquez-Muñoz et al., 2023) y obtendremos una mayor ganancia de peso al destete.
Terneras con ganancias de peso cercanas a 1 Kg por día producen en promedio 1.000 kg más de leche en la primera lactancia (Soberon et al., 2012). Esta producción puede ser asociada a que, terneras con planes de nutrición altos, desarrollan más parénquima mamario (Geiger et al., 2016). Por otra parte, al tener un buen manejo del calostro en combinación con un buen manejo nutricional y de ambiente, las terneras serán más saludables por lo que se reducirá la mortalidad y se mejorará el bienestar y sustentabilidad del sistema productivo.
Esperamos que las charlas “Terneros: claves para una crianza exitosa”, así como éstos artículos, les hayan brindado herramientas para la mejora continua de sus sistemas productivos. Los invitamos a seguir participando de nuestras actividades de capacitación donde juntos continuaremos cultivando el conocimiento, fortaleciendo al sector lechero y asegurando el bienestar de nuestros animales.
Recuerde que nuestro equipo se encuentra disponible ante cualquier consulta sobre éste o cualquier otro tema relacionado al bienestar animal. Para comunicarse con el Departamento de Bienestar Animal, por favor escriba a: [email protected]
Referencias:
De Paula, M., Oltramari, C., Silva, J., Gallo, M., Mourão, G. y Bittar, C. 2017. Intensive liquid feeding of dairy calves with a medium crude protein milk replacer: Effects on performance, rumen, and blood parameters. Journal of Dairy Science, 100: 4448-4456. DOI: 10.3168/jds.2016-10859.
Geiger, A., Parsons, C. y Akers, R. 2016. Feeding a higher plane of nutrition and providing exogenous estrogen increases mammary gland development in Holstein heifer calves. J Dairy Sci., 99:7642-7653. DOI: 10.3168/jds.2016-11283.
Jones, C. y Heinrichs, J. 2022. Penn State Extension:
Feeding the Newborn Dairy Calf. Disponible en línea en: https://extension.psu.edu/feeding-the-newborn-dairycalf# section-1
Leadley S. 2010. Calving Ease: Improving our handling of colostrum. Disponible en: https://www.calfnotes.com/pdffiles/CNCE0510.pdf
Palczynski, L., Bleach, E., Brennan, M. y Robinson, P. 2020. Appropriate Dairy Calf Feeding from Birth to Weaning: “It’s an Investment for the Future”. Animals, 10:116. DOI: 10.3390/ani10010116.
Penati, M., Sala, G., Biscarini, F., Boccardo, A., Bronzo, V., Castiglioni, B., Cremonesi, P., Moroni, P., Pravettoni, D. y Addis, M. 2021. Feeding Pre-weaned Calves With Waste Milk Containing Antibiotic Residues Is Related to a Higher Incidence of Diarrhea and Alterations in the Fecal Microbiota. Frontiers in Veterinary, 8. DOI: 10.3389/fvets.2021.650150
Rosenberger, K., Costa, J., Neave, H., von Keyserlingk, M., y Weary, D. 2017. The effect of milk allowance on behavior and weight gains in dairy calves. Journal of Dairy Science, Volume 100, Issue 1, 2017, 504-512. ISSN 0022-0302. DOI: 10.3168/jds.2016-11195.
Soberon, F., Raffrenato, E., Everett, R. y Van Amburgh, M. 2012. Preweaning milk replacer intake and effects on long-term productivity of dairy calves. J Dairy Sci., 95:783-93. DOI: 10.3168/jds.2011-4391. PMID: 22281343.
Velásquez-Muñoz, A., Rao, S., Román-Muniz, N. y Pinedo, P. 2023. Early life behavior and disease dynamics of pair-housed Holstein heifer calves. Applied Animal Behaviour Science, 265: 105982. DOI: 10.1016/j. applanim.2023.105982.