La época de inicio de los rezagos marca la época de cortes para la conservación. Es así como rezagos tempranos aseguran en gran parte forrajes de mejor calidad que rezagos tardíos, dado que el aporte nutricional de las praderas es mejor durante la primavera temprana.
Como se puede ver, la pradera comienza su crecimiento entre la segunda quincena de agosto y septiembre, época en la cual deberíamos comenzar el rezago, con una proporción de hectáreas fuera de la plataforma lechera, para no disminuir la superficie de pastoreo en esos meses críticos (figura 1)
Contar con una buena materia prima, es decir, pradera de un adecuado valor nutricional al momento del corte, asegura un forraje conservado satisfactorio, siempre que el proceso sea llevado a cabo adecuadamente. Esto se debe a que en el proceso normal de conservación de los forrajes se presentan pérdidas de masa vegetal y, consecuentemente, un deterioro del valor nutritivo.
MANEJO PARA PRODUCCION DE ENSILAJE
a) Fertilización: Suministre nutrientes de acuerdo a la fertilidad del suelo. La fertilización estratégica en el momento del rezago permitiría asegurar no solo una mayor producción, sino también disminuir los días entre el comienzo de rezago y el corte. Esto es fundamental si queremos obtener más de un corte dentro de la acotada ventana de tiempo y que nos permita asegurar un buen aporte nutricional de nuestra materia prima inicial.
El nitrógeno siempre tiene relación directa con el incremento en el rendimiento de pradera, pero dentro de ciertos rangos técnico-económicos (tabla 1). Es recomendable aplicar 50-70 unidades de nitrógeno por hectárea, correspondiente a 100-150 kg urea/ha.
b) Fechas de inicio de rezagos: Idealmente el inicio del rezago se debe planificar de acuerdo a la presencia de excedentes de forrajes. No es una fecha única, depende del sector, condiciones climáticas del año, variedad y su precocidad, carga animal, etc.
Cierres (rezagos) tempranos se permiten con praderas muy bien fertilizadas. Cosechas más tempranas permiten disponer de humedad en suelo y temperaturas adecuadas para el rebrote, lo que genera mayor crecimiento y una segunda cosecha de forrajes. El resultado de esto es mayor producción de forraje durante la temporada, con ensilajes de buena calidad. Por el contrario, un cierre tardío, implica residuos más cortos, con menores producciones para obtener forraje de calidad (tabla 2).
c) Efectos del rezago sobre la calidad de la pradera: En la medida que se atrasa el corte para ensilaje, los rebrotes son más lentos, de menor rendimiento y calidad. Esto se debe a que una mayor cantidad de macollos pasan a estado reproductivo (espigan), utilizando sus carbohidratos de reserva, las que, al ser cortadas, disminuyen la densidad de la pradera, su rendimiento y persistencia de la pradera. Por lo tanto la capacidad de rebrote disminuye, por una menor reserva de carbohidratos de reserva, perdida de macollos durante la cosecha y menor disponibilidad de agua en condiciones de secano. Rezagos más largos incrementan los rendimientos, pero disminuye significativamente la calidad nutritiva del forraje conservado (baja la energía, proteína y aumenta FDN) (tabla 3).
d) Estado de crecimiento al momento del corte: Cuando la ballica tiene más de 3 hojas debe destinarse para la confección de ensilajes el límite de cosecha corresponde a la aparición de la primera inflorescencia para obtener un ensilaje de calidad. Aproximadamente esto considera 6 a 7 semanas de rezago, posterior a esto, la calidad cae significativamente. Este estado de crecimiento permite obtener forrajes de calidad y una cantidad importante de forraje.
Del total de muestras de ensilajes enviados para concurso de calidad ensilajes para bolos de Colun durante el 2017 se resume en la tabla 4 con información promedio mensual, es relevante mencionar que en cosechas más tardías disminuye el aporte de proteína cruda en el ensilaje.
En los resultados de los análisis de ensilajes del concurso de calidad de ensilajes, los niveles de FDN en promedio no se alteran con cosechas más tardías, probablemente esto se justifique porque las muestras enviadas al concurso de Ensilaje corresponden a los mejores bolos de los predios concursantes y que coincidentemente tendrían residuos cortos.
Importante es considerar la alta extracción de potasio en los forrajes conservados. Esto debe ser considerado al momento de rezagar y de fertilización posterior al corte (tabla 5).
En resumen, la recomendación sería rezagar lo más temprano posible, saltarse los potreros de pastoreo cuando la ballica tiene más de 3 hojas y destinarlos a cosecha de ensilaje. Al momento de cosechar la pradera no debe tener más que una inflorescencia (en todo el potrero) y no exceder más de 6 a 7 semanas el periodo de rezago. Esto permite disponer de forraje de buena calidad que asegure una buena producción de leche en los periodos que no se dispone de suficiente pradera para pastorear.